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La I+D de la UPC en Terrassa: el valor de la innovación

16/01/2024

(Artículo publicado en Diari de Terrassa el día 13 de enero de 2024)


2023 ya es el pasado pero no hay que ser indiferentes con lo que dejamos atrás, sobre todo porque es allí donde se prefigura el futuro. Dicho de otra forma, nuestro presente es la consecuencia de lo que hicimos ayer. Lo recalco porque el año pasado, en Terrassa, los agentes que conformamos el ecosistema de Innovación tecnológica de la ciudad proclamamos todos que, efectivamente, este ecosistema es uno de los activos más valiosos de que dispone la ciudad y que deberíamos hacer todo lo posible por proyectar este valor -muy deseado por otras ciudades- hacia el exterior. Así es como accedemos a más oportunidades para captar recursos, la economía de la ciudad camina hacia un horizonte de valor añadido, atraemos talento nacional e internacional con profesionales altamente cualificados, se crean empresas innovadoras, el tejido empresarial del gran Vallès puede conocer y aprovechar el gran potencial dedicado a la I+D y, en definitiva, Terrassa se transforma paulatinamente en una verdadera ciudad del conocimiento.

En cuanto a la universidad, ya hemos puesto manos a la obra. Hace poco más de dos meses, acompañado por Joseba Quevedo (actual comisionado para la investigación en la UPC Terrassa) presentamos un Plan de Comunicación de la Investigación en los 29 grupos de investigación de la UPC. Es decir, a partir de este año desplegaremos una serie de acciones enmarcadas en el objetivo estratégico de posicionar la ciudad de Terrassa como uno de los motores de Innovación estratégica de Catalunya. El centro de interés de este plan será la actividad de investigación, desarrollo y transferencia tecnológica que día a día desarrollan los más de 350 investigadores e investigadoras politécnicos, la mayoría profesores y profesoras de los tres centros docentes de la UPC en Terrassa: l ESEIAAT, FOOT, CITM, añadiendo también el Intexter.

Ponemos en marcha esta iniciativa con mucha ilusión en un año especialmente positivo, porque según informes de nuestra universidad, hemos doblado la cifra media de captación de recursos de los últimos seis años; somos el campus de la UPC que más crece en ingresos y contratación absoluta, y lideramos la solicitud de proyectos. Debo destacar que la mayor parte de los recursos que nuestros investigadores han sido capaces de captar provienen de proyectos internacionales, desarrollados con universidades y empresas tanto nacionales, como de todo el mundo, adjudicados en dura competencia con otras universidades y centros de búsqueda. Este hecho constata la excelencia de la actividad de nuestros grupos de I+D, identificados en toda Europa y en el país como aliados de valor y confianza, que ejecutan sus innovaciones en 18 ámbitos tecnológicos diferentes, lo que nos proporciona las muy cotizadas transversalidad y multidisciplinariedad para abordar problemas y retos reales complejos.

A esto le llamamos predicar con el ejemplo, pasar de las palabras y de las ideas a la concreción de los hechos. ¿Y por qué estoy convencido de que es necesario hacer este esfuerzo? Además de las razones que ya he citado antes, creo sinceramente que, en primer lugar, tenemos el deber de contar a la ciudadanía ya la sociedad en general en la que nos gastamos el dinero que proviene de sus impuestos; qué somos capaces de crear con su esfuerzo diario y solidario que nos permite trabajar por el progreso y, en definitiva, por su bienestar. En segundo lugar, porque como universitarios que somos, tenemos también la obligación social de la divulgación científica, de continuar consolidando una base social libre de negacionismo y pseudociencia que no olvide nunca los fundamentos, la función y la esencia del conocimiento científico. Y en tercer lugar, porque más allá del interés social que generan las noticias que aparecen en los medios de comunicación sobre nuestra I+D, es también necesario llegar directamente a nuestros futuros aliados, a la empresa, a las pymes que no tienen la capacidad de innovar, en las instituciones territoriales, en definitiva, en el conjunto de la sociedad civil de nuestro entorno. Es preciso que conozcan nuestra potencia, que sepan cuánto eficaces, competentes y creativos pueden llegar a ser nuestros investigadores. Debemos saber explicarnos a través de la creación de espacios a los que poder invertir tiempo en conocernos y finalizar el encuentro con la sensación de haberlo aprovechado. No sé si fue Henry Ford o Bill Gates quien afirmó “si me quedara sólo un dólar me lo gastaría en relaciones públicas.” Y es que debemos tocarnos, mirarnos, destinar algunos momentos de nuestra agenda a explorar modos de ganancia recíproca, de poner en práctica el famoso win win  y encajar las manos. En definitiva, sí, en la UPC damos un paso adelante y nos colocamos en la vanguardia para posicionar la ciudad de Terrassa como uno de los motores de innovación en Cataluña, porque somos conscientes del valor de nuestra labor y empáticos con las necesidades de la industria. Quien ha trabajado con nosotros es testigo.


Xavier Roca

Director de ESEIAAT y Delegado del Rector de la UPC en Terrassa